Magdalenas de mármol veganas sin aceite ni gluten

Estas deliciosas magdalenas de mármol veganas, sin aceite ni gluten están muy ricas y son esponjosas, bajas en calorías y saludables.

Perfil nutricional: una ración, en este caso una magdalena, cubre casi el 50 % de las necesidades diarias medias de ácidos grasos omega 3. Una magdalena contiene solo 177 kcal, lo que supone menos del 10 % de la ingesta calórica diaria recomendada. El contenido de grasa, inferior al 15 %, y el de hidratos de carbono, inferior al 7 %, son también muy bajos para un aperitivo dulce. La proporción de ácidos grasos omega 6 y omega 3 se encuentra en 4:1, por debajo del máximo recomendado de 5:1. Más información a continuación: Los veganos a menudo comen alimentos poco saludables. Errores nutricionales evitables.

Almendras: tienen una buena proporción en el alto contenido de grasa del 49 %: de ésta, solo el 7,4 % son grasas saturadas y no hay grasas trans. Son una buena fuente de hierro. Aunque tienen una relación muy pobre entre el ácido linoleico (LA) y el ácido alfa-linolénico (ALA). Por eso, hemos utilizado nueces, además de almendras.

Semillas de lino: tienen un doble uso en esta receta. Primero, sirven como agua de linaza y, segundo, con un ligero sabor a frutos secos son muy saludables. Su contenido en grasa, alrededor del 50 % son ácido alfa-linoleico (ALA), un ácido graso esencial de la serie omega 3. Tienen la mayor concentración de ácidos grasos omega 3 de todos los aceites vegetales. Quienes consuman gran cantidad de alimentos industriales deberían aumentar la proporción de semillas de lino en su dieta y corregir las carencias nutricionales que tengan en este sentido.

Tipos de mousse de almendra: puede utilizar mousse de almendras blanca o marrón. La mousse blanca se prepara con almendras escaldadas, mientras que la marrón se elabora con almendras tostadas. Debido a ello, la variante oscura tiene un sabor mucho más intenso que la blanca, cuya consistencia es más fina.

Copos de avena: son ricos en proteínas y, por lo tanto, también en los aminoácidos esenciales que estas contienen. Destacan por su porcentaje de vitaminas y minerales. La avena también está disponible como avena sin gluten (vea los «Consejos»). Las semillas de avena están especialmente naturales.

Sirope de dátiles: se elabora con dátiles y agua. A diferencia del azúcar de mesa, los dátiles tienen muchos nutrientes. Con menos calorías, es similar o ligeramente más dulce que el azúcar de mesa y se cree que ayuda a la digestión. Sin embargo, al igual que el aguamiel y el sirope de arce, solo es adecuado en ciertas condiciones para las personas con intolerancia a la fructosa debido a su contenido en fructosa.

Avena y gluten: para las personas que padecen celiaquía (intolerancia al gluten), solo es intolerable la gliadina, pero no la glutenina. Por lo tanto, los afectados deben evitar los cereales clásicos, como el trigo, pero pueden comer avena en determinadas condiciones. En este caso, sin embargo, no solo hay que asegurarse de que la avena no esté contaminada con trigo y otros granos que contengan gluten, sino que además debe ser especialmente purificada. La avena correspondiente está disponible comercialmente como avena sin gluten.

Sirope de dátiles: ¡atención! Además del sirope de dátiles natural, también existe el sirope de dátiles producido artificialmente. Suele consistir en diferentes sabores y diferentes tipos de azúcar. En caso de duda, compruebe siempre la lista de ingredientes. El sirope de dátiles debe estar compuesto únicamente por dátiles y agua y, si es necesario, por zumo de limón o vainilla.

Masa esponjosa: además de la levadura en polvo, conseguimos que la masa esté esponjosa con agua mineral con gas y agua de linaza.

Omitir el aceite: hemos eliminado de forma deliberada el aceite y el azúcar por razones de salud. Para saber más sobre este tema, eche un vistazo a nuestra reseña del libro Sal, azúcar y grasas de Michael Moss.

Reducir el grado de dulzor: hemos elaborado la receta deliberadamente para que sea atractiva para los niños, por lo que no escatimamos en sirope de dátiles. Las magdalenas preparadas de este modo siguen siendo menos dulces que las convencionales, pero tienen un ligero y agradable dulzor malteado. Sin embargo, puede reducir el contenido de sirope de dátiles hasta la mitad como máximo. De este modo, obtendrá magdalenas o bizcochos sutilmente dulces pero todavía sabrosos.

Sirope de dátiles casero: se puede comprar sirope de dátiles de calidad ecológica en tiendas de dietética y en supermercados bien surtidos. Asegúrese de que no hay ningún ingrediente no deseado además de los dátiles y el agua. Puede encontrar una receta de sirope de dátiles casero aquí.

Leche de almendra o avena casera: Bebidas vegetales: utilizamos leche de avena y de almendras. También puede preparar su propia leche de avena y almendras. Si quiere obtener información sobre cómo hacer su propia leche de avena cruda y vegana o también la leche de almendras, consulte los siguientes enlaces: leche de avena, leche de almendra crudivegana.

Mousse de almendra casera: también hemos preparado mousse de almendra casera. Para ello, basta con moler 2 cucharadas de almendras en un molinillo de café eléctrico, removiendo de vez en cuando. Hágalo hasta que salga algo de aceite. Le llevará unos minutos.

Como alternativa a la fécula de patata, se puede utilizar la misma cantidad de almidón de maíz y levadura química convencional funciona en lugar del cremor tártaro.